Melones “Piel de Sapo” (7-8kg)

¿Qué diferencia a nuestros melones «piel de sapo»

Sembrados a mediados de febrero y después de más de tres meses de duro trabajo y cuidados, mimando cada planta, regando gota a gota con agua que viene de Sierra Nevada y cuidando las colmenas de abejas para que polinicen las flores que después dan los frutos que disfrutarán nuestros clientes en casa, ya tenemos los primeros melones para recolectar.

A diferencia de los supermercados los compran verdes para que vayan madurando en las estanterías, nuestros melones piel de sapo de calibre pequeño son recogidos y enviados en su punto óptimo de maduración para poder disfrutar de su dulzor y textura característica.

Nosotros sólo los cortamos cuando estén de “buen comer”. Queremos que sepa al melón “de antes”. A medida que avancen las semanas los melones irán cogiendo aún más dulzor.

Ya tenemos los primeros melones de la temporada pero el trabajo no ha finalizado ni mucho menos. Aunque todas las plantas se siembran el mismo día, no todas las flores salen a la vez ni las abejas las polinizan en el mismo momento. La polinización y el cuaje de los frutos se extiende en un periodo de 6 semanas aproximadamente y por este motivo en este momento tenemos melones durante este periodo de tiempo.

Ahora toca cuidar los melones más pequeños (son los que cuajaron al final y serán por tanto los últimos en recoger). Los melones de fin de temporada pueden ser un poco más “feos” de aspecto ya que pueden tener la piel un poco quemada pero también suelen ser los más dulces. No te dejes llevar por las apariencias, su sabor es lo importante.

Nuestras recomendaciones:

No lo metas en la nevera hasta unas pocas horas antes de que lo vayas a comer. Mételo entero (sin cortar).

Una vez que lo empieces intenta consumirlo en un par de días para que no pierda propiedades (como son pequeños no hay problema). La parte que da al corte se reseca con los días por lo que es importante taparla bien con un film.

Otra opción es cortar lo que sobre en daditos y meterlo en un taper bien cerrado.

Por qué se llaman melones «piel de sapo»:

Los melones piel de sapo, conocidos científicamente como Cucumis melo ‘Santa Claus’, tienen su origen en España, donde se cultivan desde la década de 1920. Su nombre se debe a la textura rugosa de su piel, que recuerda a la piel de un sapo.

Se caracterizan por su tamaño, que puede alcanzar hasta 30 centímetros de largo, y su forma ovoide. Su piel es gruesa y rugosa, de color verde oscuro con motas amarillas. La pulpa es de color blanco o crema, con un sabor dulce y refrescante, y una textura crujiente y jugosa.

Los melones «piel de sapo» son ideales para:

Consumir y disfrutar frescos, sólo o acompañado, en ensaladas, macedonias, o incluso como ingrediente en gazpachos y otros platos tradicionales. Su sabor único y su textura refrescante los convierten en un producto irresistible durante la temporada de verano.

Beneficios para la salud de los melones «piel de sapo»:

Los melones piel de sapo son una fuente excelente de vitaminas y minerales, incluyendo vitamina C, potasio, magnesio y ácido fólico. También son ricos en fibra, lo que ayuda a mantener una digestión saludable. Además, su alto contenido en agua los convierte en una fruta ideal para hidratarse durante los meses de verano.